"América Latina es una región que sigue llevando el legado de impunidad", dice desde Ciudad de México la abogada en derechos humanos Erika Guevara, directora para las Américas de Amnistía Internacional. Para Guevara, la impunidad, la desigualdad social y la corrupción hacen que los Estados no cumplan con su obligación de proteger a los ciudadanos y dejen a las organizaciones sociales y a los defensores de los derechos humanos solos "peleando en la trinchera".
En esa dirección, Nicaragua es uno de los países más golpeados de la región.