El cantante explicó en sus redes sociales que era el momento de “ayudar, apoyar y tener la mente con los afectados”.

Dos semanas después, el álbum ya está disponible en todas las plataformas digitales. Sus diecisiete nuevos temas –hasta ahora solo había publicado uno, Duro– funciona como una velada de fiesta en la que no faltan los escarceos, juegos de seducción, algún que otro verso que reproduce estereotipos machistas y contradicciones.

“Son las 2:26, y yo escribiendo esto para que después no salga y saque algo comercial porque tengo una carrera, un público que alimentar. Una presión constante no sé dónde va a parar. Y lo único de lo que no tengo fuerza es para mandarte esto baby”, entona en Te fallé, su colaboración con Sech.

El álbum comienza con nueve canciones que repiten temáticas, estilo y tono; hasta evolucionar hacia sonidos y letras más reflexivas que van más allá de la juega y seducción de la noche. La primera, Kassandra, habla a otra artista a la que habría conocido hace tiempo, que iba “acompañada siempre, pero siempre sola”, con quien conectó por sentirse de forma parecida: “Tú eres diferente, estar aquí te pone triste”. Una mujer con la que se habría reencontrado tiempo después, en el que asegura que la ve “sonreír más tranquila, aprendió a obedecer lo que siente”.

Esta introducción recuerda a su tema del anterior álbum, La última, en el que ahondaba en el rápido ascenso de su carrera, y recordaba: “Cuando ocio y negocio eran dos palabras separadas. Ya no soy capaz de volver pa' atr'a. Y tengo tanto dinero, no sé ni pa' qué lo quiero. Gastarlo todo, e' que quiero volver a verme en cero”.

El mismo tono lo aplica a Qué asco de todo, lo más parecido a una balada del elepé, en la que se sincera sobre la soledad, el dolor y el hartazgo. “No hay nadie alrededor, qué asco de todo no me puede ir peor (...) No hay manera de que hoy me vea guapo. Nadie me entiende cuando digo qué asco de todo”, enuncia. Al mismo tiempo, reconoce que piensa que hablar sobre ello no será lo que vuelva a colocarle en lo más alto de las listas de reproducciones y ventas de música. “Escribo esto sabiendo que si sale del pecho no va a sonar en la radio”, comenta.

La vuelta tras un breve parón

Buenas Noches llega después de que Quevedo decidiera frenar su carrera el pasado mes de febrero, y desaparecer un tiempo de los focos. “No soy una máquina, voy a desconectar”, justificó. Desde que se diera a conocer en la música urbana en 2020, fue ganando fama gracias a temas como No me digas nada, Ahora y siempre o Sin señal, antes de dar el gran salto con su Bzrp Sessions vol. 52 –archiconocida mundialmente como Quédate– junto a Bizarrap. Donde quiero estar (2023) fue su álbum debut.

Aitana, Young Beef, Pitbull, Sin nombre, La Pantera, Rels B, De La Rose, De la Guetto y Sech han sido los artistas elegidos para las colaboraciones que incluye en su nuevo disco, en el que mezcla la autocrítica a los hombres con a su vez versos machistas. Si en Iguales reconoce: “No me hagas caso, solo soy un puto heterobásico. En mí no debes confiar. Todos los hombres somos iguales. Solo queremos dinero, mujeres y abdominales. Sé que te duele pero baby, es la verdad”. En Por atrás espeta: “Yo sé que me odias y es por eso que te voy a dar más duro”.