Andalucía, Cantabria, Región de Murcia, Comunitat Valenciana, Aragón, Castilla-La Mancha, Extremadura, Madrid y Castilla y León son las autonomías que apoyan este premio. De todas las que están gobernadas por el Partido Popular, tan solo no se han sumado Galicia y La Rioja.
El Senado, una cámara controlada por el PP y que a finales del mes de mayo aprobó una moción para que Urtasun reconsiderara la decisión, en la que el PSOE se abstuvo, respalda un premio que se va a presentar el próximo 30 de enero en la sede de la Comunidad de Madrid.
El Ministerio de Cultura culminó la supresión en septiembre con una orden ministerial en el BOE. La orden estuvo precedida de una consulta ciudadana en la que el 90% de los que participaron apoyaron la eliminació de este Premio Nacional. Al mes siguiente, la Fundación del Toro de Lidia recurrió judicialmente ante la Audiencia Nacional esta supresión.
El Premio Nacional de Tauromaquia estuvo vigente entre 2011, cuando las competencias taurinas se trasladaron al Ministerio de Cultura y hasta 2023, con la decisión del ministro cultural, a la vez portavoz de Sumar, cuya posición antitaurina es notoria y previa a su acceso al cargo. “Un país que cuida y no maltrata a los animales, es un país mejor”, dijo Ernest Urtasun en mayo, tras conocerse la supresión del premio.
Debido a que la Ley 18/2013 para la regulación de la Tauromaquia como patrimonio cultural sigue vigente y señala que “la Tauromaquia forma parte del patrimonio histórico y cultural común de todos los españoles”, la mencionada fundación considera que la actuación del Ministerio es una “discriminación completamente injustificada” y contraria a esa ley. En un vídeo publicado este martes por la fundación, su presidente Victorino Martín afirma que “el Premio Nacional de Tauromaquia se va a seguir otorgando con normalidad”.
