Alberto Núñez Feijóo ha vuelto a escenificar uno de los nuevos ejes de su estrategia de oposición: mostrarse como una alternativa al Gobierno de coalición para “afrontar la emergencia que vive España en materia de vivienda”.

El presidente de PP había convocado este jueves una reunión con representantes del sector de la construcción, arquitectos y registradores, organizaciones de propietarios, representantes de entidades juveniles y a sus consejeros y consejeras autonómicas. “No concibo otra manera de abordar la política de estado que no sea de forma conjunta”, aseveró durante una comparecencia sin preguntas a través de dos plasmas. “La mesa de la vivienda con las Administraciones se llama Conferencia Sectorial, donde están representadas comunidades autónomas y ayuntamientos”, responden fuentes del Ministerio de Vivienda, que recuerdan que esta “se ha reunido cinco veces en esta legislatura, más que las convocadas por el Gobierno de Mariano Rajoy” y que el presidente Sánchez ya ha impulsado una mesa del sector, que se ha reunido en dos ocasiones.

El plan propuesto por Feijóo supone, dice, una “reforma completa para una política de vivienda que sirva”. Es, a grandes rasgos, la declaración de Asturias, el cónclave de Feijóo con sus presidentes autonómicos en el que acordaron un paquete de medidas con las viejas fórmulas 'populares': más construcción, menos intervención, bajas de impuestos y un discurso duro contra la okupación.

En concreto, Feijóo ha pedido “eliminar trabas” para garantizar “toda la agilidad posible” en los planes urbanísticos. “A más demanda, hay que responder con más oferta, no con más restricciones, impuestos o burocracia”, ha insistido. En este sentido, ha repetido la idea de movilizar suelo público para construir vivienda asequible a precios tasados a un 30% por debajo del de mercado. Además, ha comprometido un portal del suelo con información de todas las parcelas disponibles, agilizar las licencias de obra nueva implantando el silencio positivo a los tres meses y a reducir los trámites de competencia autonómica de los 9 a los 3 meses, a través de la modificación de las leyes autonómicas del suelo.

La única novedad anunciada por Feijóo este jueves ha sido la propuesta de un “tiempo de excepción” para los planes residenciales estratégicos que se presenten en los próximos 4 años. Estos deberán destinar la mitad de los inmuebles a vivienda asequible. Además, ha señalado que este viernes el partido registrará en el Senado su Ley del Suelo, tras el bloqueo a la presentada por el Gobierno, que reclamaban alcaldes de todo signo. “Ya esta en el Congreso, no hace falta presentar más. ¿Cuándo firma el Partido Popular?”, lanzan fuentes del departamento que dirige Isabel Rodríguez.

En el apartado de apoyo a la demanda, Feijóo ha vuelto a repetir que las comunidades gobernadas por el PP establecerán un tipo del 4% para el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y ha vuelto a pedir al Gobierno un IVA temporal reducido. Además, ha comprometido, otra vez, un aval hipotecario para la compra de la primera vivienda hasta los 40 años y ayudas a personas y familias vulnerables y con menores a cargo.

Feijóo había soliviantado el miércoles a la Plataforma de Afectados por la okupación y lo que han venido a llamar 'inquiokupación' con el anuncio de su voto a favor del nuevo decreto ómnibus pactado entre Junts y el Gobierno y que incluye la moratoria antidesahucios a familias vulnerables. La organización, que inicialmente había anunciado que no acudiría a ningún acto del PP en materia de vivienda, ha rectificado y, según fuentes del partido, ha terminado acudiendo a la reunión de este jueves.

El presidente del PP ha vuelto a prometer una ley antiokupación que garantice el desalojo de las viviendas en 24 horas y que endurezca las penas. “La vivienda es un derecho, pero no es un derecho la okupación. Cuando dependa solo de nosotros, acabaremos con ello”, aseguró.