El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha asegurado que la ofensiva lanzada la semana pasada en la región fronteriza rusa de Kursk está avanzando en varias zonas y que en algunos lugares del frente han progresado uno o dos kilómetros desde el inicio de la jornada.

“Hemos capturado a más de 100 soldados rusos durante este periodo”, agregó Zelenski en un mensaje publicado en redes sociales y que se refiere a una actualización de la situación proporcionada por su comandante en jefe, Oleksandr Syrskyi.

Aunque el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania, Heorhiy Tykhyi, aseguró este martes que Ucrania no está interesada en apoderarse de territorio en el óblast de Kursk, Tykhyi afirmó que Ucrania necesita protegerse de los ataques rusos y alejar a las fuerzas de Putin de las zonas fronterizas que Rusia utiliza para atacar a Ucrania. Tykhyi también señaló que las operaciones ucranianas en la región de Kursk impiden que el ejército ruso transfiera unidades militares adicionales a la región de Donetsk, lo cual complica la logística militar rusa.

Este miércoles, la televisión ucraniana ha mostrado las primeras imágenes de la localidad rusa de Sudzha, en la región de Kursk, que el Ejército de Kiev asegura haber tomado bajo su control completo como parte de su ofensiva transfronteriza. En estas imágenes aparecen soldados ucranianos quitando las banderas rusas y colgando la ucraniana.

La incursión ucraniana en Kursk ha sido apoyada este miércoles por el primer ministro finlandés, Petteri Orpo, quién defiende que Ucrania tiene derecho a defenderse y realizar una incursión militar en la región rusa de Kursk. “Ucrania tiene derecho a la legítima defensa y está claro que puede realizar su operación en Kursk”, dijo Orpo en una conferencia de prensa conjunta en la capital finlandesa con su homólogo estonio, Kristen Michal.

Por su parte, Rusia asegura que las fuerzas rusas no han estabilizado completamente la situación en el óblast de Kursk a pesar de los esfuerzos en curso para estabilizar la línea del frente y repeler los ataques ucranianos.

Según informa el Instituto de Estudios para la Guerra (ISW, por sus siglas en inglés), el mando militar ruso podría estar retirando unidades irregulares rusas de la región de Donetsk para hacer frente a la incursión ucraniana en la región de Kursk. 

El gobernador de la zona fronteriza rusa de Belgorod, Vyacheslav Gladkov, ha declarado el estado de emergencia en toda la región. El ejército ucraniano ha contraatacado al otro lado de la frontera tras el estancamiento del avance de las fuerzas rusas en la región de Járkov, según informa The Guardian. “La situación en la región de Belgorod (situada debajo de la región de Kursk) sigue siendo extremadamente difícil y tensa”, declaró Gladkov, añadiendo que estaba haciendo un llamamiento al Gobierno de Vladimir Putin para que declarara una situación de emergencia federal en un vídeo publicado en Telegram.

Gladkov declaró que se habían producido 23 ataques con drones en las últimas 24 horas en Belgorod. “Los bombardeos y la metralla han dañado una iglesia, 14 casas, un edificio administrativo, varios vehículos y una tubería de suministro de gas”.

Fuentes rusas afirmaron entre este lunes y martes que soldados del Batallón “Sarmat” de la Brigada “Pyatnashka” rusa y del Cuerpo de Voluntarios Rusos se habían trasladado recientemente a la región de Kursk. Según el ISW, las autoridades rusas parecen estar dependiendo en gran medida de reclutas rusos y de elementos de algunas unidades militares regulares e irregulares extraídos de sectores menos críticos de la línea del frente para hacer frente a la incursión ucraniana en curso. 

Desde que empezó la incursión, decenas de personas han muerto y unas 120.000 han tenido que ser evacuadas de la región. Según informaciones de Europa Press, Ucrania ya ha logrado hacerse con el control de unos 1000 kilómetros cuadrados, según han informado sus autoridades.