Irán ha lanzado cientos de misiles a Israel este martes, muchos de los cuales han sido interceptados. El Ejército de Benjamin Netanyahu ha anunciado el inicio del ataque y ha dado instrucciones a los ciudadanos para que busquen refugio en “lugares protegidos” si escuchan sirenas. El ataque se produce tras los masivos bombardeos israelíes contra Hizbulá, respaldada por Teherán, en Líbano, en los últimos días, a los que ha seguido una invasión terrestre este martes.

La Guardia Revolucionaria iraní ha confirmado el lanzamiento de misiles como respuesta a los asesinatos del líder de Hamás, Ismail Haniyeh, el jefe de Hizbulá, Hasán Nasrala, y un general iraní. “Con el disparo de decenas de misiles balísticos, se ha golpeado los objetivos en el corazón de los territorios ocupados”, ha indicado el cuerpo militar de élite. “Si el régimen sionista responde a la operación iraní, hará frente a duros ataques”, ha dicho, recoge la agencia IRNA. La misión iraní en la ONU ha dicho por su parte que el ataque es una “respuesta legal, racional y legítima a los actos terroristas”.

Israel ha dicho que el ataque “tendrá consecuencias”. Así lo ha afirmado Daniel Hagari, portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel, que ha dicho que actualmente no hay más amenazas procedentes de Irán hacia Israel, lo que parece indicar que el ataque con misiles ha terminado. También se ha notificado a los residentes que pueden abandonar los refugios antiaéreos. Hagari ha informado de que se han interceptado “bastantes” misiles“ y de que hay algunos impactos ”en el centro y en zonas del sur del país“.

El portavoz israelí también ha añadido que de momento desconocen si hay víctimas. Antes, los servicios de emergencia habían informado de que dos personas han resultado heridas leves en Tel Aviv como consecuencia del ataque.

Según recoge Reuters citando la Radio del Ejército israelí, Irán ha lanzado casi 200 misiles contra Israel. No está claro cuántos han alcanzado algún objetivo. La mayoría de los testigos hablaban de misiles que sobrevolaban la zona.

Las sirenas han sonado en todo Israel, que ha interrumpido su espacio aéreo, y se han escuchado explosiones en Tel Aviv y Jerusalén. El Ejército israelí ha informado de que las explosiones que se oían eran “de intercepciones o proyectiles caídos”. 

Según un comunicado la Casa Blanca, Joe Biden ha ordenado a los militares estadounidenses “ayudar a la defensa de Israel contra los ataques iraníes y derribar misiles que apuntan a Israel”.

La agencia de noticias estatal iraní IRNA ha publicado imágenes de los misiles surcando los cielos del país. Los misiles procedentes de Irán han sido avistados en los cielos de Jordania, que durante el ataque del pasado abril interceptó los proyectiles en su espacio aéreo evitando que alcanzar Israel.

La voz de alarma del ataque la dio unas horas antes este martes EEUU, que a través de un alto cargo dijo a la prensa que Irán estaba preparando el lanzamiento “inminente” de misiles balísticos contra Israel y también advirtió de “graves consecuencias” en caso de que se produjera.

“Estados Unidos está apoyando activamente las preparaciones de defensa para defender a Israel contra este ataque”, indicó la misma fuente.

Una fuente estadounidense había afirmado a Reuters que, de producirse, el ataque podría ser tan grande o potencialmente mayor que el de abril. El portavoz militar israelí Hagari aseguró también que el ataque iraní “podría ser de gran alcance” e instó a los ciudadanos a refugiarse en lugares seguros en tal caso.

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, lanzó este lunes una advertencia a Irán, que respalda a Hizbulá en Líbano y a Hamás en Gaza. “No hay ningún lugar en Oriente Medio al que Israel no pueda llegar”, declaró Netanyahu, pocos días después de que un ataque aéreo al sur de Beirut matara al líder del grupo libanés, Hasán Nasrala.

El líder en funciones de Hezbolá, Naim Kassem, prometió que el grupo seguiría luchando tras la muerte de su líder. Israel también ha asesinado a varios de los principales comandantes del grupo en los últimos días. Kassem afirmó que los combatientes del grupo están preparados y que los comandantes asesinados ya han sido sustituidos.

El pasado mes de abril, Irán lanzó su primer ataque directo contra Israel, con cientos de misiles y drones que fueron interceptados en su mayoría antes de alcanzar el espacio aéreo israelí o antes de impactar en el país. Eso fue posible por la intervención de las fuerzas de EEUU y otros aliados occidentales y árabes de Israel, que apoyaron las defensas aéreas israelíes frente a la lluvia de proyectiles.