El canciller alemán, Olaf Scholz, ha hablado este viernes por teléfono con el presidente ruso, Vladimir Putin, por primera vez desde 2022 y le ha pedido poner fin a la guerra en Ucrania y abrirse a unas negociaciones serias con Kiev para lograr una paz “justa y duradera”.

Según han confirmado fuentes gubernamentales alemanas a EFE, Scholz ha enfatizado que “ninguno de los objetivos bélicos” de Rusia había sido alcanzado sobre el terreno y, por ello, ha instado a Putin “a estar dispuesto a entablar negociaciones serias con Ucrania con el objetivo de lograr una paz justa y duradera”. El canciller ha pedido a Putin “para que ponga fin a la guerra de agresión contra Ucrania y retire las tropas” de ese país.

Scholz había hablado por última vez con Putin por teléfono en diciembre de 2022 y, el pasado miércoles, lo hizo con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski. Este viernes ha vuelto a condenar la guerra de agresión rusa, que lleva ya casi mil días causando muerte, sufrimiento y destrucción en Ucrania.

El canciller alemán ha lamentado en particular los ataques aéreos contra infraestructuras civiles en Ucrania y ha subrayado que el despliegue de soldados norcoreanos en Rusia para misiones de combate contra territorio ucraniano representa una grave escalada y expansión del conflicto.

Scholz había señalado en las últimas semanas la posibilidad de conversar con Putin, al que le ha transmitido la “inquebrantable determinación” de Alemania de apoyar a Ucrania en su lucha defensiva mientras sea necesario. El político socialdemócrata, que encabeza actualmente un Gobierno en minoría en Alemania, ha agregado que el apoyo a Ucrania está es a largo plazo y que el presidente ruso no puede contar con que el tiempo esté de su parte.

De acuerdo con las fuentes, Scholz y Putin han acordado permanecer en contacto.

Esta conversación telefónica se produce cuando Ucrania se encuentra en una situación complicada, ya que Rusia gana a diario terreno en la región oriental de Donetsk y, por otro lado, teme por la ayuda occidental, especialmente la estadounidense, una vez llegue a la Casa Blanca el republicano Donald Trump en enero.

Trump se ha mostrado reacio a seguir proporcionando armamento a Kiev. Por otro lado, Alemania no contará con un presupuesto para 2025 y no tendrá un Gobierno estable tras la ruptura de la coalición hasta mediados del próximo año, lo que también complica que pueda proporcionar asistencia adicional a Zelenski.