Los dos países recuperan tratos con el foco en el comercio y la inmigración tras la crisis suscitada por el acercamiento en 2022 de Pedro Sánchez a la postura marroquí respecto al Sáhara
Argelia, tras las elecciones presidenciales: entre el continuismo de Tebboune y el retroceso de los derechos humanos
Tras casi tres años de crisis diplomática, España y Argelia han dado señales públicas en los últimos días de las relaciones bilaterales entre ambos países han mejorado.
Durante la última reunión del G20 celebrada en Sudáfrica en febrero, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, compartió en redes una fotografía con su homólogo argelino, Ahmed Attaf, acompañada de un mensaje sobre su intención de “reforzar aún más los lazos entre los dos países”. Por su parte, también con tuit, el presidente de Argelia, Abdelmadjid Tebboune, describió a España como un “país amigo” y felicitó al escritor argelino Yasmina Khadra por el premio Casa Mediterráneo, una institución pública en la que participa el Ministerio de Exteriores y con sede en Alicante.
Reunión con el ministro de Asuntos Exteriores de Argelia @AhmedAttaf_Dz en #G20SouthAfrica.Hemos tratado nuestras relaciones bilaterales y acordado reforzarlas aún más. También abordamos Palestina, el Sahel, el Mediterráneo y Ucrania. Creemos en la paz y multilateralismo. pic.twitter.com/HOIM9YOGgb
— José Manuel Albares (@jmalbares) February 21, 2025A los gestos de acercamiento se suma la visita a Madrid el pasado lunes del ministro de Interior de Argelia, Brahim Merad. Merad se convierte así en el primer mandatario del país del norte de África en visita oficial a España tras la crisis diplomática que llegó a su culmen en marzo de 2022. Según Interior, el ministro Fernando Grande-Marlaska, recibió a su homólogo en un encuentro para compartir “temas de interés común sobre protección civil y cooperación policial y migratoria”.
Una carta lo cambió todoMadrid y Argel rompieron lazos diplomáticos el 19 de marzo de 2022, justo un día después de que el Palacio Real de Marruecos difundiera una carta enviada el día 14 por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. La misiva, aunque no extensa, tenía la carga política suficiente para alterar el estatus de la región del norte de África, pues aseguraba que España reconocía la propuesta marroquí de autonomía sobre el Sáhara Occidental presentada en 2007 como la “base más seria, creíble y realista para la resolución de este diferendo (sic)”. Una carta que abandonaba así la neutralidad de España respecto su excolonia en Marruecos para relanzar las nuevas relaciones entre los dos países que, hasta entonces, salían de una crisis diplomática de 10 meses.
Como respuesta, Argel retiró a su embajador en España, Said Moussi, y la diplomacia argelina se mostró sorprendida “por este repentino cambio de posición de la antigua potencia administradora del Sáhara Occidental”, según un comunicado de su Ministerio de Asuntos Exteriores. Tres meses más tarde, Argel suspendió el Acuerdo de Amistad y Buena Vecindad y bloqueó el comercio exterior con España. La decisión supuso un descenso de las exportaciones españolas de 1.888 millones de euros en 2021 a tan solo unos 350 millones en 2023.
Las transacciones entre ambos países continuaron pausadas hasta noviembre de 2023, cuando Argelia reinició el acercamiento diplomático con el nombramiento de un nuevo embajador en Madrid, Abdelfetá Daghum, y la publicación de una nueva circular del Banco Central de Argelia que normalizaba los intercambios. A principios de 2024 ya se autorizaron las importaciones de productos como la carne roja, el pollo y los huevos, y el pasado 17 de febrero, la Cámara de Comercio de Alicante culminó una misión de tres días en Argelia, en la primera visita institucional después del levantamiento de las restricciones comerciales.
Francia continúa perdiendo influencia en ÁfricaAunque los motivos de la reconciliación entre España y Argelia no están todavía claros, el acercamiento se produce en un contexto de crisis diplomática entre Argelia y Francia. A finales de julio de 2024, el presidente francés, Emmanuel Macron, aseguró que la solución de la crisis del Sáhara Occidental pasaba por el plan de autonomía propuesto por Rabat. Argelia respondió con la retirada inmediata de su embajador en París.
En los últimos acontecimientos, Argelia denegó la entrada al país de Doualemn, un influencer argelino deportado por el país galo. En París había sido acusado por las autoridades de incitar a la violencia a través de vídeos de TikTok. Aun así, una vez deportado a Argel, las autoridades se negaron a dejarlo desembarcar.
La inmigración en el centro de la mesaLa prioridad principal en la reunión entre Marlaska y su homólogo argelino ha sido la inmigración. El deterioro de las relaciones entre ambos ha tenido un impacto en la cooperación contra la inmigración irregular, sobre todo a raíz de que las autoridades del país magrebí bloquearan las repatriaciones de sus nacionales. A finales de 2024, Baleares registró alrededor de 6.000 entradas irregulares procedentes de las costas argelinas, un aumento de 200 personas respecto a 2023.
En su visita, Merad estuvo acompañado por las autoridades de ambos países así como por el secretario de Estado español de Seguridad, Rafael López, la subsecretaría del Ministro del Interior, Susana Crisóstomo, y la directora general de Relaciones Internacionales y Extranjería, Elena Garzón.