Un anciano de 70 años ha muerto y otras cuatro personas están heridas tras ser apuñaladas en la estación central de autobuses de Haifa, en el norte de Israel, en un ataque que la Policía israelí ha calificado de “terrorista” y cuyo perpetrador fue abatido en el lugar.

“Los técnicos de emergencias y paramédicos del Magen David Adom han declarado muerto a un hombre de 70 años y atienden a cuatro pacientes: tres en estado grave (un hombre y una mujer de unos 30 años, y un joven de 15) y una mujer de 70 años en estado moderado”, han explicado en un comunicado los servicios de emergencias.

La Policía ha confirmado poco después en otro comunicado en sus canales de difusión que ha “neutralizado y eliminado” al perpetrador del ataque. Según el periódico Haaretz, el atacante era de nacionalidad israelí.

El ataque se produce en un momento de tensión, después de que este domingo haya expirado la primera fase del alto el fuego en Gaza, sin que Israel y Hamás hayan alcanzado un acuerdo para extenderlo. De momento, Israel no ha reanudado su ofensiva a gran escala contra la Franja, pero en la mañana del lunes ha lanzado un ataque aéreo y ha matado a dos personas, y dejado al menos a otras tres heridas en la ciudad de Rafah, en el extremo sur de Gaza. 

El el pasado 27 de febrero se produjo un ataque similar en el norte de Israel: un atropello colectivo perpetrado por un palestino procedente de la ciudad cisjordana de Yenín, cuyo campo de refugiados es objeto desde hace más de un mes de una macrooperación del Ejército israelí que ha causado decenas de muertos.

El atropello ocurrió en una parada de autobús en Karkur, cerca de Hadera (norte), y causó 14 heridos, entre ellos una menor de 17 años que quedó en estado crítico. El conductor, de 53 años, fue abatido poco después, a cuatro kilómetros del lugar del ataque.