El Palacio del Elíseo anunció el martes por la mañana que el presidente se dirigiría a los franceses en un mensaje televisado para abordar “únicamente cuestiones de defensa nacional en el contexto ucraniano”
Europa se prepara para defenderse sola mientras contiene a Trump
El presidente francés, Emmanuel Macron, se ha dirigido este martes a los franceses en un discurso televisado para abordar la situación internacional, en particular la relativa a Ucrania, para responder a las “legítimas inquietudes” de los ciudadanos.
“A día de hoy no podemos creer la palabra de Rusia”, ha afirmado el presidente frances, Emmanuel Macron, en un discurso televisado sobre la situación internacional. “Estamos en una nueva era”, ha señalado tras lamentar el giro de política exterior de EEUU. El presidente también ha anunciado un plan de paz diseñado con Ucrania y otros socios europeos: “Creemos que EEUU estará de nuestro lado, pero debemos estar preparados si ese no es el caso”.
“La amenaza rusa está ahí y afecta a todos los países de Europa”, ha afirmado Macron. “Rusia continúa rearmándose ¿Quién puede creer en este contexto que la Rusia de hoy parará en Ucrania?”. El presidente aboga por rearmar Europa para disuadir nuevas amenazas: “La Europa de la defensa, que hemos defendido durante ocho años, se convierte en una realidad”.
“El mundo se está convirtiendo en cada vez más brutal y la amenaza del terrorismo no cesa, nuestra prosperidad y nuestra seguridad se han vuelto más inciertas”, afirmó Macron. “Entramos en una nueva era”.
El presidente francés había anunciado por la mañana a través de un mensaje en la red social X una intervención televisada ante los franceses. “Mis queridos compatriotas, esta noche a las 20 horas me dirigiré a vosotros, en este momento de gran incertidumbre en el que el mundo se enfrenta a sus mayores desafíos”. Después de su alocución televisiva está previsto que Macron reciba en el Elíseo al primer ministro húngaro Viktor Orbán. Y el jueves se desplazará a la cumbre extraordinaria de líderes de la Unión Europea.
En Washington, Bruselas, Londres y París el presidente francés ―junto al primer ministro británico Keir Starmer― está multiplicando los esfuerzos diplomáticos en las últimas semanas para que Estados Unidos no deje de lado a los europeos en sus negociaciones con Moscú y para organizar una posición continental común ante los cambios en la escena internacional.
El martes Macron había felicitado a Volodímir Zelenski por las declaraciones del líder ucraniano mostrando su voluntad de “reanudar el diálogo con los Estados Unidos”, para reparar las relaciones tras la secuencia que había comenzado con la tensa reunión ante las cámaras en el despacho oval de la semana pasada.
El martes las autoridades norteamericanas anunciaron la suspensión del envío de ayuda militar a Kiev y el miércoles la pausa en la transmisión de información de inteligencia. Macron, que mantuvo contactos en los últimos días tanto con Zelenski como con Trump, también reiteró el martes “la determinación de Francia de trabajar con todas las partes implicadas para lograr una paz sólida y duradera en Ucrania”.
Las convulsiones en la escena internacional generadas por las decisiones de la Administración Trump han vuelto a situar al presidente francés en el centro de la actualidad informativa tras unos meses en segundo plano, en los que los focos se centraron en el primer ministro y en las negociaciones del Gobierno con los partidos políticos en la Asamblea Nacional.
Un nuevo contexto que parece tener ya un impacto en la imagen del presidente ante los franceses. Según el último barómetro del Instituto demoscópico Toluna Harris Interactive para la cadena de televisión LCI, publicado el pasado viernes, el índice de aprobación de Emmanuel Macron ha subido seis puntos en las últimas semanas, hasta situarse en el 37%. Es la primera vez desde diciembre de 2023 que se invierte la curva descendente en la aprobación de la acción del actual jefe de Estado francés.