Tras los últimos ataques de Moscú y la ofensiva sorpresa de Ucrania en la región rusa de Kursk, Kiev trata de levantar el veto de EEUU y de los socios de la OTAN al uso del armamento occidental en territorio ruso
Un nuevo ataque ruso con drones y misiles causa al menos cuatro muertos en varias regiones de Ucrania
Ucrania quiere más. Cuando se cumplen 30 meses desde el comienzo de la invasión rusa, Kiev, que este verano ha sorprendido a sus aliados con la ofensiva en la región fronteriza rusa de Kursk, pide a sus aliados mover una vez más la última línea roja que habían marcado: levantar el veto al uso de las armas de largo alcance entregadas por los socios occidentales para ataques en territorio ruso.