La ley fue propuesta por el partido del primer ministro Benjamín Netanyahu y aprobada por la vía rápida con el apoyo de los socios de la coalición gobernante ultranacionalista
El Parlamento israelí ha aprobado una ley que permite la deportación de familiares de “terroristas” por un periodo de entre siete y 20 años, si se demuestra que conocían los planes del atacante y que no hicieron nada por detenerlo, o mostraron su apoyo y alentaron los actos violentos.