Aunque a veces esas preferencias individuales sí coinciden: Icíar Gutierrez (redactora de Internacional) y Belén Remacha (Sociedad) han elegido a Centro Di Gravità Permanente de Franco Battiato porque al principio de la pandemia Italia era una referencia para comprobar cómo podría evolucionar el virus en nuestro país y porque durante la cuarentena hubo también algo de buscar canciones que nos trasladaran a momentos y lugares en los que habíamos sido más felices.
Ese lugar feliz a veces no es un país, sino una canción del pasado. Vanesa Rodríguez, directora de Nuevas Audiencias, recurrió a Te quiero de José Luis Perales para sustituir las ganas de no haberle podido ver en directo. Mientras, tanto Ana Ordaz (periodista de Datos) como Cristina Armunia (responsable del Minuto del coronavirus) han coincidido en escuchar en bucle a Mecano con temas como Perdido en mi habitación o El fallo positivo.
Quizá el confinamiento también fue un periodo de descubrimientos y de ponernos al día con la cultura. Es lo que le ocurrió a Diego Larrouy (redactor de Economía) con The Weeknd y la canción Blinding Lights, que utilizaba para animar las tardes del confinamiento tras el teletrabajo. Nuestro Director Adjunto, Gumersindo Lafuente, también descubrió a la artista Travis Birds, que ya había escuchado en el arranque de la serie de El Embarcadero y en la contraversión de la famosa 19 días y 500 noches de Joaquín Sabina.
2020 tampoco ha sido un buen año para las fiestas. Por eso Raúl Sánchez (Datos) y Nando Ochando (Vídeo) eligieron montarla entre cuatro paredes con Tusa de Karol G o Si veo a tu mamá de Bad Bunny. O Marina Estévez (jefa de Economía), que según las estadísticas de su Spotify soportó que su hijo pusiera para animarse 14 veces seguidas la canción Lance Amstrong de Parquesvur.
Buscar la "vibra" opuesta a la de la pandemia para ponerse de buen humor era también lo que buscaba Mónica Zas (periodista de Cultura actualmente de apoyo en Sociedad) con Saturday Sun de Vance Joy, una canción que quiso aprender a tocar y acabó convirtiéndose en su BSO particular. En la misma línea está María Ramírez (subdirectora), que encontró el ánimo en The Rising de Bruce Springsteen, un álbum publicado tras el 11-S e inspirado en parte en los atentados y el espíritu de solidaridad que se generó después.
Salir a la calle se convirtió en algo casi inédito, por eso Ana Requena (redactora jefa de Género) recuerda Las ventanas se encienden de Mucho como la banda sonora para salir a comprar o, más tarde, durante los primeros paseos y encuentros. O Rodrigo Ponce (redactor jefe de Economía), que utilizó Shut ‘Em Up de The Prodigy y Public Enemy para hacer deporte durante el confinamiento.
Recopilar las razones tras las canciones que hemos disfrutado este 2020 daría para un artículo mucho más extenso, por eso la mejor opción es unirlas todas en una lista de Spotify que quizá no sea la más homogénea, pero esa es precisamente su virtud: reflejar los altibajos y la diversidad con la que hemos vivido un año que siempre recordaremos.
