El Tribunal Supremo de Reino Unido ha declarado ilegal este martes por unanimidad la suspensión del Parlamento decretada por el primer ministro Boris Johnson. Los 11 jueces del tribunal afirman que el cierre de las cámaras es "ilegal, nulo y sin efecto".
Johnson anunció el pasado 28 de agosto suspender temporalmente el Parlamento durante cinco semanas. El objetivo era dejar sin tiempo a los parlamentarios para que no pudiesen aprobar una ley que frenase un Brexit sin acuerdo el 31 de octubre. Johnson, sin embargo, no logró su objetivo porque los diputados aprobaron esta legislación mediante un mecanismo de emergencia antes de que se echase oficialmente el cierre el pasado 10 de septiembre.
"Esta suspensión prolongada de la democracia parlamentaria tuvo lugar en unas circunstancias excepcionales: el cambio fundamental que iba a tener lugar en la Constitución de Reino Unido el 31 de octubre", sostiene la sentencia. "El Parlamento, y en particular la Cámara de los Comunes como representante electo del pueblo, tiene el derecho a tener voz en cómo se produce ese cambio. El efecto sobre los fundamentos de nuestra democracia fue extremo", añade.
Los jueces alegan que "no se ha presentado ante el tribunal una justificación para tomar acciones con un efecto tan extremo". La maniobra de Johnson para suspender la actividad parlamentaria consistió en anunciar el cierre de la sesión parlamentaria anual y anunciar una nueva que se inaugura con el discurso de la Reina. "No explica por qué era necesario paralizar la actividad parlamentaria durante cinco semanas cuando el periodo normal necesario para preparar el discurso de la Reina es de cuatro a seis días", señala la sentencia.
"El Tribunal concluye por tanto que la decisión de recomendar a Su Majestad prorrogar el Parlamento fue ilegal porque tenía el efecto de frustrar o prevenir la habilidad del Parlamento de llevar a cabo sus funciones constitucionales sin una justificación razonable", añade el fallo.
La sentencia sostiene que los próximos pasos los tomará el presidente de la Cámara de los Comunes, John Bercow, y el de la Cámara de los Lores. "Celebro la decisión del Tribunal Supremo de declarar ilegal la suspensión del Parlamento", ha afirmado Bercow. "La Cámara de los Comunes se debe reunir sin dilación. Con este objetivo, consultaré a los líderes de los partidos de forma urgente", ha añadido.
La sentencia pone fin a un proceso judicial iniciado en varios tribunales nacionales. En Escocia, el Tribunal de Apelaciones había declarado ilegal la suspensión parlamentaria, mientras que en Inglaterra los jueces consideraron que era legal.
Los principales partidos políticos de la oposición han pedido la dimisión del primer ministro, entre ellos el líder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, y el de los Liberal Demócratas, Jo Swinson. El partido nacionalista galés, Plaid Cymru, y el Partido Nacional Escocés, también han solicitado su salida.
"Invito a Boris Johnson a considerar su posición y convertirse en el primer ministro que menos tiempo ha durado en el cargo", ha afirmado Cotbyn desde la conferencia del Partido Laborista.