El jefe de la diplomacia europea hará esa propuesta en su última reunión con los ministros de Exteriores de la UE como respuesta a la petición de España e Irlanda de revisar el acuerdo comercial por las vulneraciones del derecho internacional por parte del Gobierno de Netanyahu
Borrell arremete contra Israel por usar el hambre como arma de guerra y llevar a cabo una “limpieza étnica” en Gaza
El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, planteará a los gobiernos de la UE suspender el diálogo político con Israel.
La propuesta parte de la violación del derecho internacional y humanitario en Gaza, que los 27 ya han señalado por los ataques a los cascos azules en Líbano y cuyo incumplimiento es una vulneración de las normas del Acuerdo de Asociación de la UE con Israel.
La propuesta se discutirá en el Consejo de Asuntos Exteriores, previsto para el lunes próximo en Bruselas, para ver qué piensan los Estados miembros al respecto.
De este modo, Borrell cumple su promesa de llevar este asunto al último Consejo de Exteriores que presidirá antes de ceder el testigo a la estonia Kaja Kallas.
Según los informes de organismos internacionales independientes, hay razones para considerar que Israel está violando los derechos humanos y el derecho humanitario internacional, añadieron las fuentes diplomáticas citadas por la Agencia EFE, que precisan que suspender el diálogo político no significa la suspensión del Acuerdo de Asociación o del Consejo de Asociación. En realidad, añadieron, puede ser algo que se pueda discutir en el Consejo de Asociación con Israel.
Ahora bien, la propuesta pone formalmente sobre la mesa el debate entre los Estados miembros sobre cómo ven el comportamiento de Israel y si creen que el Gobierno de Benjamín Netanyahu puede estar violando los derechos humanos y el derecho humanitario internacional.
Al mismo tiempo, dieron las fuentes diplomáticas, es una “señal política seria” sobre cómo ve la UE el comportamiento de las autoridades israelíes por la guerra en Gaza y en el Líbano.
Este paso se produce después de que Borrell constatase la imposibilidad de reunir al Consejo de Asociación con Israel para escuchar al jefe de la diplomacia de ese país, como habían pedido antes del pasado verano los ministros de Exteriores de los Veintisiete.