Se trata de una moción no vinculante presentada por la unión de democristianos y socialcristianos bávaros (CDU-CSU), líder en las encuestas, y apoyada por la extrema derecha, lo que plantea dudas sobre el futuro del cordón sanitario
La Cámara Baja del Parlamento alemán ha aprobado este miércoles una resolución no vinculante propuesta por los conservadores encaminada a cerrar las fronteras a los demandantes de asilo, un texto que salió adelante con los votos de la ultraderecha, en lo que los socialdemócratas del canciller Olaf Scholz han condenado como la “ruptura de un tabú”.
Un total de 348 diputados han votado a favor de la resolución presentada por la unión de democristianos y socialcristianos bávaros (CDU-CSU) a raíz de un ataque con cuchillo con dos muertos la semana pasada, mientras que 345 se pronunciaron en contra y diez se abstuvieron.
La moción llama a introducir de forma permanente controles fronterizos y a rechazar sin excepciones a los extranjeros indocumentados, aún cuando expresen su intención de solicitar asilo —en contravención del Derecho europeo—, así como a detener de forma indefinida a las personas pendientes de deportación, entre otras medidas, que se presentaron en plena campaña electoral.
En el bronco debate parlamentario previo, habían anunciado su intención de apoyar la propuesta los liberales —antiguos socios de coalición de Scholz—, la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) y la izquierda populista de la Alianza Sahra Wagenknecht (BSW), mientras que los socialdemócratas, los Verdes y La Izquierda votaron en contra.
Una segunda moción de una veintena de puntos para incrementar las competencias de las autoridades con el objetivo de reforzar la seguridad interior, que también había sido introducida por CDU-CSU, ha sido rechazada con 509 votos en contra.
Inmediatamente después de la votación, el jefe del grupo parlamentario socialdemócrata, Rolf Mützenich, ha hablado de un “punto de inflexión” en la política alemana y ha afirmado que al aceptar los votos de la ultraderecha por primera vez para obtener una mayoría parlamentaria, los conservadores habían abandonado el “centro democrático”.
El líder y candidato democristiano, Friedrich Merz, ha indicado por su parte que “lamentaba” que el día de hoy se hubiera logrado una mayoría con los votos de AfD, pero aseguró que era el deber del resto de partidos democráticos no “evadir su responsabilidad” y hacer posible un compromiso sin el concurso de la ultraderecha.
Hace tan solo unas semanas Merz había rechazado taxativamente cualquier tipo de cooperación con AfD, pero a raíz del ataque de la semana pasada en Aschaffenburg, perpetrado por un afgano solicitante de asilo que apuñaló a un niño de dos años y un hombre de 41 en un parque, anunció un endurecimiento de la política migratoria que impondría sin compromisos como jefe de Gobierno, aun con los votos de la ultraderecha.