Estados Unidos trasladará al oeste de Irak a todos los soldados que decidió retirar del norte de Siria antes de la ofensiva turca, con el fin de defender el territorio iraquí y combatir al grupo terrorista Estado Islámico (EI).
El secretario de Defensa de EE.UU., Mark Esper, hizo el anuncio a última hora del sábado a los periodistas que viajaban con él hacia Afganistán, informan este domingo varios medios estadounidenses.
La decisión afectará a aproximadamente mil soldados estadounidenses que estaban en el norte de Siria y que el presidente de EE.UU., Donald Trump, ordenó retirar de allí antes de que su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, lanzara una ofensiva contra milicias kurdosirias hace casi dos semanas.
"Nuestro plan actual es que esas fuerzas se reubiquen en el oeste de Irak", explicó Esper, y añadió que el objetivo es que esos soldados "ayuden a defender Irak" y a reducir al EI.
Las declaraciones de Esper contrastan con el mensaje que Trump ha enviado reiteradamente desde que anunció su polémica decisión de retirar a las tropas de Siria: que quiere poner fin a las "guerras sin fin en Oriente Medio".
Trump repitió hoy ese discurso en un tuit matutino, al afirmar: "Los soldados de Estados Unidos no están en zonas de combate o de alto el fuego (en Siria). Hemos conseguido mantener seguro el petróleo. ¡Estamos trayendo a los soldados a casa!".
La retirada de los soldados en Siria sigue en marcha mediante aviones y convoyes, pero Esper subrayó que se está haciendo con sumo cuidado y que pasarán "semanas" antes de que se complete.
Estados Unidos ya tiene desplegados a unos 5.000 soldados en Irak para asistir y entrenar a las tropas kurdas e iraquíes en su combate al EI, y la suma de otros 1.000 en la zona occidental demuestra la preocupación estadounidense sobre la posibilidad de que el grupo yihadista retome territorio liberado en los últimos años.
La referencia de Trump en su tuit a "mantener seguro el petróleo" en el norte de Siria, una afirmación que también hizo este viernes, generó confusión en el país por no estar claro a qué se refería, aunque el mandatario ha dicho muchas veces que EE.UU. cometió un error al no llevarse el crudo de Irak cuando se retiró en 2011.
Trump también generó sorna en las redes sociales al referirse en su tuit al secretario de Defensa como "Mark Esperanto".
Mientras, el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, se mostró "optimista" de que se mantenga el alto el fuego entre Turquía y las milicias kurdosirias, a pesar de que ambos se acusan mutuamente de haber violado la tregua.
"He recibido informes sobre la situación y hay relativamente pocos combates. Esperamos que las fuerzas (kurdosirias) SDF salgan de esos pueblos en virtud del acuerdo", dijo hoy Pompeo en declaraciones a la cadena de televisión ABC News.
El acuerdo entre Ankara y Washington da a las milicias hasta el martes para abandonar una zona de 30 kilómetros desde la frontera turca, donde Turquía quiere crear una "zona de seguridad" para reubicar a hasta dos millones de sirios de otras regiones.
Por su parte, la presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU., la demócrata Nancy Pelosi, se encuentra en Jordania, donde este sábado se reunió junto a otros congresistas estadounidenses con el rey Abdalá II y parte del Gobierno jordano.
En un comunicado, Pelosi aseguró que el diálogo se centró en "el impacto en la estabilidad regional" de la ofensiva turca en Siria y "la peligrosa puerta que se ha abierto al EI, Irán y Rusia".