Siempre cae alguno por el camino. Y Rovana Plumb y László Trócsányi pueden ser los primeros. La socialdemócrata rumana no ha superado el examen preliminar y vinculante de la comisión de Asuntos Jurídicos del Parlamento Europeo, que este jueves ha votado en contra de validar su declaración de bienes y ha dictaminado que presentaba unos conflictos de intereses incompatibles con ser comisaria europea de Transportes.
Rovana Plumb, exministra socialdemócrata rumana, fue señalada en un caso de corrupción en 2017, acusada de ayudar al líder de su partido en una operación inmobiliaria relacionada con la compra de una isla en el río Danubio considerada de propiedad estatal.