En el panorama poético español de los años 90, Roger Wolfe (Westreham, Kent, 1962) fue una figura singular. Su expresión dura, bañada de cierto malditismo, lo encasilló inicialmente en el llamado "realismo sucio", aunque con el tiempo se demostró capaz de dar forma a una obra de mayor alcance. Poeta, ensayista, narrador, este autor de origen inglés ha seguido fiel a sí mismo hasta hoy. Tras publicar su lírica completa hasta 1993 en el volumen Toda esta poesía (Renacimiento), Wolfe, alrededor de un vaso de café en una terraza sevillana, recuerda cómo fue este recorrido.