La pinza formada entre Alemania e Italia, entre otros países, ha logrado arrancar a la UE un acuerdo de última hora para desbloquear la prohibición de vender coches de combustión en 2035 a cambio de salvar del veto a los denominados combustibles sintéticos o e-fuels.
Estos carburantes, defendidos por algunas petroleras y por fabricantes de coches de lujo como Porsche, Ferrari, Lamborghini o Audi, entre otros gigantes industriales, emiten carbono pero son considerados climáticamente neutros. También son mucho más caros que los actuales y su viabilidad económica está por demostrar.