Tienen apariencia de beneficios para los trabajadores, pero en realidad son síntomas de una dura competencia en Alemania por conquistar a trabajadores cualificados. No en vano, la propia canciller Angela Merkel se movilizaba hace unos días en una cumbre especial para hacer de su país una nación más atractiva para la mano de obra cualificada de todo el mundo. En el mercado laboral germano se estima que hay por cubrir 1,4 millones de empleos para trabajadores cualificados.
Abundan en Alemania las empresas necesitadas de esta mano de obra que han desarrollado un arsenal de medidas con el que persuadir a empleados propios y ajenos sobre la conveniencia de integrar sus filas.
Leer más: Vacaciones pagadas por ser "padre privilegiado" en el mercado laboral alemán