El Gobierno británico ha anunciado este miércoles que subirá del 19% al 25% el impuesto a los beneficios de las empresas, como primera medida para tratar de sanear las cuentas públicas después del masivo gasto causado por la pandemia de la COVID-19. La medida se implantará a partir de abril de 2023.
El ministro británico de Economía, el conservador Rishi Sunak, anunció este miércoles la iniciativa, que afectará sólo a las empresas más grandes y con mayores beneficios, en la presentación ante el Parlamento de los Presupuestos para este año, donde adelantó que la deuda británica alcanzará en 2023 un pico del 97,1% del producto interior bruto (PIB).