Una parte del salario bruto, alrededor del 40%, se destina a pagar cotizaciones sociales a la Seguridad Social. Pero los trabajadores con remuneraciones más altas no contribuyen por todo su sueldo. En España, hay establecido un tope, la llamada "base máxima de cotización", fijada en los 4.139 euros brutos al mes en 2022. Por encima de esta cantidad, el sueldo no cotiza a la Seguridad Social. En total, en España hay unos "35.000 millones de euros" en salarios al año que no contribuyen al sistema al superar ese límite, responden desde el Ministerio de la Seguridad Social a consultas de este medio.