Adiós a la 'excepción ibérica' que permitió a España y Portugal poner un precio máximo al gas con el que se genera la electricidad. La medida, que lleva sin activarse desde febrero por la estabilización de los precios de la energía, decaerá de manera automática el 31 de diciembre de 2023, que es la fecha límite que estableció la Comisión Europea. La vicepresidenta para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha sugerido que ni siquiera plantearán una prórroga porque son conscientes del 'no' del gobierno comunitario, que ha pedido ya a los estados miembros que eliminen las ayudas que pusieron en marcha en lo peor de la crisis energética.